El grupo de Inmunobiología Linfocitaria de la
Facultad de Medicina de la Universidad Complutense tiene una dilatada
experiencia e interés en fisiopatología leucocitaria, con especial énfasis en
los linfocitos T desde ambos lados de la sinapsis inmunológica y en todos los
campos de la inmunopatología (principalmente en inmunodeficiencia/ infección
pero también en aloinmunidad, autoinmunidad y alergia). Nuestro objetivo
general es el estudio del desarrollo, activación y función de los linfocitos T
en condiciones patológicas adquiridas o congénitas, en relación con las
moléculas MHC clásicas y no clásicas. Con nuestros resultados tratamos de
delinear las intrincadas interacciones que tienen lugar dentro y entre las
células T, y con otros leucocitos y tejidos, y de transferir nuestros hallazgos
al ámbito del diagnóstico y la terapia. Para ello se analizan modelos de ratón,
líneas celulares y muestras humanas con las últimas técnicas de biología celular,
citometría de flujo, proteómica y genómica. Tenemos un acreditado historial de
formación de investigadores posdoctorales, estudiantes y técnicos de
laboratorio tanto en el entorno clínico como académico, y gestionamos uno de
los mejores y mayores Departamentos de Inmunología de España, con docencia en
la mayoría de los grados académicos relevantes (Biología, Farmacia, Medicina,
Bioquímica y Nutrición).
En 1986 describimos la primera
inmunodeficiencia selectiva de linfocitos T, que más tarde probamos que era
debida a mutaciones en la cadena invariante CD3 gamma del receptor para
antígeno del linfocito T (TCR). A este primer artículo siguieron trabajos
seminales sobre el papel de CD3g en la selección de la célula T y en la
estructura, dinámica y señalización del TCR, así como sobre algoritmos
diagnósticos y la prueba de concepto de la terapia génica en dichas patologías.
En los últimos 5 años hemos hecho varias contribuciones que han establecido las
inesperadas propiedades de las cadenas CD3, tales como su papel diferencial en
humanos frente a ratones, y su estequiometría diferencial en los isotipos
alphabeta vs gammadelta del TCR en humanos frente a ratones. Esto nos llevó al
intrigante hallazgo de que el TCR alphabeta es topológicamente diferente en linfocitos
T CD4+ vs CD8+, lo que abrió la puerta al concepto de la inmunosupresión
específica de linaje T. Los defectos de los linfocitos T humanos requieren
modelos in vitro adecuados, y sobre ellos también hemos hecho aportaciones en
los últimos años, tanto en inmunodeficiencias congénitas, como adquiridas.
Más recientemente, el grupo se ha interesado en la supervisión nuclear de los reordenamientos del ADN por los precursores linfoides y en el papel de las moléculas accesorias de las células T en la biología leucocitaria. En este sentido hemos demostrado que las señales vía GITR amplifican selectivamente linfocitos Treg, algo que puede tener implicaciones terapéuticas, y que, de forma análoga a los TLR, SLAM/CD150 es también un sensor de bacterias, que de esta manera puede enriquecer las señales del TCR y regular la diferenciación y función de los linfocitos T efectores. También se han descrito por primera vez dos características interesantes, con implicaciones clínicas, en relación con los linfocitos invariantes NKT y MAIT intestinales y sus respectivos ligandos MHC de clase I no clásicos (CD1d y MR1):
el equilibrio de la susceptibilidad/protección a la lisis de las células dendríticas infectadas con Leishmania por células NKT/NK depende de la inducción de CD1d/HLA-E, y MR1 se expresa en células plasmáticas intestinales productoras de IgA. Esto ha aumentado nuestro interés en la inflamación intestinal, que se basa en trabajos anteriores sobre el impacto de la isquemia caliente en la inflamación del riñón y su rechazo alogénico.
Por último, nuestros principales logros en educación superior incluyen un reciente Máster en Inmunología verificado por la Aneca y un programa de Doctorado de Inmunología con mención de calidad por el Ministerio de la Ciencia desde 2003.
Más recientemente, el grupo se ha interesado en la supervisión nuclear de los reordenamientos del ADN por los precursores linfoides y en el papel de las moléculas accesorias de las células T en la biología leucocitaria. En este sentido hemos demostrado que las señales vía GITR amplifican selectivamente linfocitos Treg, algo que puede tener implicaciones terapéuticas, y que, de forma análoga a los TLR, SLAM/CD150 es también un sensor de bacterias, que de esta manera puede enriquecer las señales del TCR y regular la diferenciación y función de los linfocitos T efectores. También se han descrito por primera vez dos características interesantes, con implicaciones clínicas, en relación con los linfocitos invariantes NKT y MAIT intestinales y sus respectivos ligandos MHC de clase I no clásicos (CD1d y MR1):
el equilibrio de la susceptibilidad/protección a la lisis de las células dendríticas infectadas con Leishmania por células NKT/NK depende de la inducción de CD1d/HLA-E, y MR1 se expresa en células plasmáticas intestinales productoras de IgA. Esto ha aumentado nuestro interés en la inflamación intestinal, que se basa en trabajos anteriores sobre el impacto de la isquemia caliente en la inflamación del riñón y su rechazo alogénico.
Por último, nuestros principales logros en educación superior incluyen un reciente Máster en Inmunología verificado por la Aneca y un programa de Doctorado de Inmunología con mención de calidad por el Ministerio de la Ciencia desde 2003.
Por lo tanto creemos que
estamos bien preparados para contribuir a los objetivos de investigación del
consorcio desde la perspectiva de la inmunología celular, y con los objetivos
educativos y de visibilidad con nuestra experiencia académica, como se detalla
en el programa.